La Plaza del Campeón, frente a la estación de trenes de Banfield, se vistió con los colores de las banderas de las diferentes colectividades en celebración del Día del Inmigrante el 4 de septiembre. La muestra comenzó el viernes 2 y se extendió hasta el domingo 4. Los países que participaron mostraron las particularidades de sus culturas, como artesanías, comidas, música, entre otras cosas.
Cabe recordar que el 4 de septiembre de 1812 el Primer Triunvirato declaró de interés el fomento de la inmigración. De ahí que en esta fecha se celebre el Día del Inmigrante. El Preámbulo de la Constitución señala que el territorio está abierto “para todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino”.
Muchos fueron los países que participaron de la muestra. Además estuvieron presentes diferentes provincias de Argentina, como Formosa, Mendoza y Catamarca. Cada una con comidas y bebidas típicas. Así como también se presentaron algunas localidades de la provincia de Buenos Aires, como por ejemplo San Vicente, cuyos nativos presentaban los dulces caseros de su propia estancia y permitían degustarlas a las personas que visitaran su stand. Entre los exponentes dulces estaba la miel reducida en azúcar. “Tiene un 30 por ciento menos de gluten que la miel pura”, vendía un joven de la mesa.
Sin duda, lo más llamativo de todos los exponentes y el más comentado fue el de Perú. Entre la bijouterie artesanal hecha con piedras, los monederos y llaveros fabricados con cuero peruano, las muñecas tejidas a mano, la platería, y la ropa típica, había un juego de mesa que llamaba la atención de todas las personas. Era un ajedrez con tablero y piezas de madera, pintado a mano. Pero no era convencional, porque no eran piezas blancas y negras, sino que parte de esas piezas representaban a los Incas, mientras que las otras representaban a los españoles. “Es maravilloso”, exclamó sorprendida una señora al oír la explicación de la vendedora del puesto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario